Se empiezan a preparar el día de antes (en reposo)
INGREDIENTES:
500 gr. de harina de fuerza
65 gr. de azúcar
10 gr. de sal
15 gr. de levadura fresca
4 huevos
125 gr. de mantequilla sin sal (en pomada)
150 ml. de agua
aceite de girasol para freírlos
Glaseado
200 gr. de azúcar glas
4 cucharadas de agua
Rellenos
1 bote de crema de cacao con avellanas, mermelada o dulce de leche 😉
PREPARACIÓN:
Lo primero que tengo que decir es que vais a necesitar un termómetro de cocina tipo éste o éste.
El día anterior, ponemos en un bol todos los ingredientes, menos la mantequilla y el aceite, y amasamos durante unos 5 minutos. Como la masa es muy pegajosa, os recomiendo el robot pero también podéis hacerla a mano.
Pasados esos 5 minutos, incorporamos la mantequilla poco a poco mientras seguimos amasando.
Una vez integrada toda la mantequilla, amasamos 5-10 minutos más hasta obtener una masa lisa y homogénea.
Espolvoreamos un bol con harina, ponemos la masa en él y lo tapamos con un trapo. Dejamos el bol un par de horas en un lugar templado hasta que duplique su tamaño.
Pasado este tiempo, enharinamos la mesa de trabajo y las manos y volvemos a amasar ligeramente.
Ponemos la masa de nuevo en el bol, lo tapamos con papel film y guardamos en el frigorífico durante toda la noche.
Al día siguiente viene lo guay. Forramos una bandeja con papel vegetal.
Sacamos la masa del frigorífico y enharinamos la mesa de trabajo (muy poco porque la masa está fría y se corta fácilmente). Cortamos porciones de 45 gr. más o menos, hacemos bolitas y las depositamos en el papel vegetal.
Aplastamos ligeramente cada bolita con los dedos.
Tapamos con un trapo y dejamos reposar un par de horas en un lugar templado hasta que doblen su tamaño.
Antes de freír preparamos el glaseado mezclando bien el azúcar glas con el agua.
Ponemos abundante aceite de girasol (como para que no rocen el fondo) en un cazo pequeño al fuego, hasta que alcance los 180º C.
Freímos las berlinas en grupos de dos o tres (yo las freí de una en una) durante dos minutos por cada lado, retiramos con una espumadera y las depositamos sobre papel de cocina para quitar el exceso de aceite.
Una vez retirado el exceso de aceite, rebozamos las berlinas en la glasa o en el azúcar.
Cuando se enfríen las rellenamos generosamente con una manga pastelera equipada con una boquilla.
Nota: Si os resulta más cómodo podéis recortar el papel de cocina y depositar las berlinas en el fuego con él, después de un rato se desprende y retira fácilmente.
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